23 de diciembre de 2021 In Derecho

La Carta de Derechos Digitales en España: ¿qué es y para qué sirve?

Compartir

La gran transformación digital vivida en los últimos años y que continúa desarrollándose, ejerce una gran influencia en todas las actividades de la sociedad, y en el propio derecho individual y colectivo. Sin embargo, los comportamientos derivados de esa transformación no siempre se encuentran previstos dentro de la legislación vigente. Es por ello que se ha aprobado la Carta de Derechos Digitales en España y en Vegas Legal os lo comentamos todo.

¿Qué es la Carta de Derechos Digitales en España?

La Carta de Derechos Digitales en España es un texto de carácter no normativo adoptado por el Gobierno el 14 de julio de 2021.

Se trata de un documento que aporta un marco de referencia con el cual garantizar los derechos de los ciudadanos en la realidad digital que vivimos a día de hoy. Realidad que presenta vulnerabilidades nuevas, pudiendo ser muy graves algunas de ellas.

Para su elaboración, la Secretaría de Estado de Digitalización e Inteligencia Artificial ha contado con un grupo de expertos multidisciplinares.

Han colaborado asociaciones de defensa de derechos, como la Agencia Española de Protección de Datos y ha tenido contribuciones del sector privado, proveedores de servicios y el sector público competencialmente afectado.

Además, para completar este proceso participativo que dio como resultado la Carta de Derechos Digitales en España, se realizaron dos consultas públicas de las que se recibieron más de 250 aportaciones.

¿Cuál es la función de la Carta de Derechos Digitales?

Uno de los objetivos principales de la Carta de Derechos Digitales es reconocer todos los retos que se presentan de la adaptación de los derechos actuales al entorno digital y virtual.

Hay que ser conscientes de que algunas innovaciones tecnológicas y de inteligencia artificial se ejecutan al margen del ordenamiento jurídico. Esto pone en jaque el papel tradicional del Estado y se originan muchos desafíos:

  • La descentralización. Un gran ejemplo es la tecnología blockchain o cadena de bloques, esa base de datos pública donde el control lo tienen los usuarios.
  • La protección de datos.
  • El anonimato.
  • Identidad digital.
  • Amenazas de ciberseguridad.
  • Opacidad de los procesos.
  • Propiedad de los datos.

Entre muchos otros.

La Carta de Derechos Digitales en España lo que ha hecho es recoger principios y derechos con el fin de dirigir futuros proyectos normativos y políticas públicas. Estas deberán garantizar la protección de los derechos personales y colectivosdentro de los nuevos escenarios digitales.

Por todo ello, se puede decir que la Carta posee tres objetivos:

Objetivo descriptivo

El texto describe los contextos y los escenarios digitales que pueden dar lugar a nuevos conflictos y/o situaciones que deberían resolverse.

Objetivo prospectivo

Dentro de la Carta de Derechos Digitales en España se anticipan los futuros escenarios que desde ahora pueden predecirse.

Objetivo asertivo

Se habla de un objetivo asertivo porque se revalidan y legitiman las técnicas, principios y políticas que deberían ser aplicados en los espacios y entornos digitales actuales y futuros.

Además de eso, este texto también quiere reforzar la confianza y certidumbre de la ciudadanía ante la nueva realidad digital y los cambios que trae esta consigo.

Adaptación de los derechos con la Carta

La Carta de Derechos Digitales en España pretende actualizar algunos derechos existentes y ya reconocidos. Por ejemplo, los que se incluyen en la propia Constitución Española o en la Declaración de Derechos Humanos.

Una actualización siempre basada y adaptada a las nuevas circunstancias digitales. Para ello, se divide en seis categorías principales.

Derecho de igualdad

El texto aprobado por el Gobierno recoge el necesario derecho a la igualdad y a la no discriminación dentro de entorno digital, el derecho de accesibilidad universal al mismo y el derecho de acceso a Internet.

La Carta también promueve la correcta protección de los menores dentro del entorno digital. Los objetivos principales de esto son:

  • Que progenitores o tutores velen para que los menores de edad hagan un uso adecuado del mismo.
  • Que se preserve su dignidad.
  • Garantizar el apropiado desarrollo de su personalidad.

Por otro lado, se impulsa el fomentar el acceso a todos los colectivos. También la promoción de algunas políticas de carácter público para suprimir brechas de acceso a los entornos digitales. 

Derecho de participación y conformación del espacio público

Algunas de las novedades que se incluyen en este apartado son:

  • El derecho a la neutralidad de la red.
  • A recibir información veraz de forma libre.
  • También incumbe a la participación ciudadana a través de medios digitales.
  • El derecho a la educación digital.

Derechos de libertad

La Carta de Derechos Digitales en España también señala el derecho a que los datos de los usuarios estén protegidos y a la identidad del entorno digital.

Además, cubre el derecho a no ser perfilado y localizado, el pseudonimato, derecho a la herencia digital y a la ciberseguridad.

Ámbito laboral y profesional

Se recoge, con la Carta de Derechos Digitales en España, el derecho al descanso y la desconexión digital. Además, también guarda un espacio para hablar de la conciliación de la vida personal y familiar.

Por otro lado, se promueve la evaluación del impacto en el uso de los algoritmos o el desarrollo de condiciones propicias para la creación de espacios de pruebas bajo control.

Garantías y eficacias

En este ámbito se incluyen varios derechos. Entre los más relevantes están el relativo a la tutela administrativa y judicial en el entorno digital.

Derechos en entornos específicos

Este apartado es uno de los más novedosos del texto, ya que se centra en ámbitos muy concretos.

Por ejemplo, uno de los más pioneros es el que se enfoca en los derechos ante la inteligencia artificial. Según la Carta, la IA debe garantizar una perspectiva centrada en las personas y su dignidad.

Adicionalmente hay un espacio dedicado a los derechos digitales en el uso de las neurotecnologías. Dentro de ellos se habla de:

  • Garantizar a cada persona el control sobre su propia identidad.
  • Confidencialidad.
  • Confirmar que procesos y decisiones que se basen en estas tecnologías no estén condicionadas por un suministro de datos.

¿Qué supone para España este texto?

Con esta Carta, España da un paso más para impulsar una transformación digital humanista.

Además, con ese empuje se busca que nuestro país continúe situado en un lugar vanguardista a nivel internacional en lo que a la protección de derechos de la ciudadanía se refiere.

Para confirmar esto, este texto tiene como base los avances que ya habían sido establecidos para reconocer los derechos digitales.

Entre ellos destacan el reciente Real Decreto Ley 28/2020, de 22 de septiembre, de trabajo a distancia y el Título X de la Ley Orgánica 3/2018, de 5 de diciembre, de Protección de Datos Personales y garantía de los derechos digitales.

También pretende contribuir de manera activa a diferentes debates e iniciativas que se desarrollen en el ámbito europeo y global.

Además, el que se haya adoptado este texto significa que se ha cumplido con uno de los objetivos que se habían recogido en el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia marcados para la segunda mitad de 2021.

Y con ello, a su vez, también se da cumplimiento a uno de los 10 objetivos propuestos dentro de la agenda España Digital 2025.

Sin duda, este texto es un buen mapa que señala el camino a seguir. Camino que si transitamos todos, nos permitirá disfrutar de un entorno digital saludable, del que aprovechar y desarrollar todas sus oportunidades y potencial. Si necesitáis asesoramiento, no dudéis en consultarnos.


Compartir

Leave a Reply